Las sociedades nacen como una herramienta para el control por el incremento de población cuando el ser humano se consolida como sedentario y se apropia de tierras que le servirán para generar alimento, poder y ganancias. Además, surge la familia como factor principal y más antiguo de sociedad, y no solo porque conforman un núcleo, sino porque comienza con un modelo jerárquico que convencionaliza la libertad de cada miembro. Esa propuesta que define Jean Jaques Rousseau en su obra “El contrato social”, responde a lo que hasta en la actualidad es la sociedad y sus convenciones para el orden y funcionamiento de esas “masas” en conjunto.
Desde entonces, se vive en un ciclo rutinario, pero las personas se acostumbran porque desde que nacen están condicionadas a vivir en las condiciones que ya están impuestas. Las elecciones, por ejemplo, es un simple mecanismo de gobierno que ha sido impuesto para elegir quién va a ser la autoridad, bajo estándares de grupos que se han establecido durante años como los dueños del país, detrás de la máscara de actores políticos que llevan una aparente trayectoria de logros.
Sobre el tema de los planes de trabajo que han propuesto, cumplen nada más el típico discurso político, simplemente es que ha cambiado la forma y han definido mediante las nuevas tendencias sobre lo que la sociedad guatemalteca cree que necesita, entonces surge también otra cuestión… si la mayoría guía su opinión con base en la información expuesta por los medios de comunicación e internet, no se puede asegurar que exista certeza en ella sobre lo que cree necesitar.
Cada individuo define sus propias necesidades, y dependiendo de su contexto, el resto del colectivo también tiene las mismas necesidad en común, pero son conducidas y producto de lo que el mismo Estado no ha podido cumplir porque los fondos destinados para el desarrollo solo se reparten en el mismo grupo de control y poder.
La cultura se rige por el discurso mediático elaborado por los medios y ahora mucho más eficiente por las redes sociales, en las cuales la información es tan extensa y variada que se dificulta aún más para las personas analizar e interpretar tanto, resguardan lo que les resulta más fácil y el mensaje que interpreta se refleja en sus decisiones, en consecuencia, en lo que creen necesitar. Las elecciones este año entonces, resultarán ser el reflejo de lo que hasta ahora se considera como lo necesario… y el ciclo se repite bajo los estándares de los grupos de control.